En muchos casos, un héroe no se mide por algo increíble que haya hecho, sino que porque inspira a mucha gente. Jim Plunkett es mi héroe porque él me inspira a nunca darme por vencido.
Jim tuvo muchos obstáculos que sobrepasar. Desde niño, Jim siempre soñaba de estar en la NFL. Le tomó mucha valentía para llegar allí. En el colegio, sin embargo, Jim ganó el Trofeo Heisman y lideró a su equipo al Tazón de las Rosas (Rose Bowl). El obstáculo más grande que encaró fue cuando tenía 30 años de edad y jugaba para los 49ers de San Francisco. A Jim lo cortaron del equipo después de que todos lo llamaron "arrojado". Luego, en 1980, fue firmado por los Raiders de Oakland y los llevó al Súper Tazón (Super Bowl). Ese año fue nombrado el Jugador Más Valioso del Súper Tazón XV, y fue nombrado el Jugador de Mejor Regreso del Año. Eso demuestra que Jim Plunkett nunca se dio por vencido, incluso después de que todos lo habían hecho.
Me parece a mi que Jim tiene mucha valentía porque él jugaba incluso cuando estaba lastimado o tenía algún dolor. Por ejemplo, una vez se lastimó el hombro, pero siguió jugando. Los padres de Jim también le dieron un espíritu luchador porque a pesar de que estaban ciegos, no querían ser tratados diferente de la otra gente. Jim era un buen trabajador porque, en vez de sentirse mal por si mismo, él usaba su tiempo para intentar mejorar. Él nunca dejó ir de su sueño.
Jim hizo grandes contribuciones al fútbol americano profesional porque él ayudó a que los Raiders le ganaran a los Redskins de Washington en el Súper Tazón. Él es un modelo a seguir por nunca darse por vencido. Con todo los obstáculos que se le presentaron, Jim nunca se dio por vencido.
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