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Letrero de El Zapote School hecho por estudiantes de la clase de carpintería |
Mientras tomaba un descanso de ayudar a ser juez en el primer festival de Films nacional de El Salvador, por el cual recibí un Fulbright el septiembre pasado, fui a Barra de Santiago, un pequeño pueblo pesquero cerca de la frontera con Guatemala. Mientras tomaba fotografías en la madrugada (ver fotos) mire a Wendy, la hija de quince años del curador, vistiendo su uniforme escolar, mochila puesta, cargando un remo, y subiéndose a una canoa. Cuando le pregunte que adonde iba, me dijo que iba a remar a la escuela, y recoger a algunos compañeros en el camino. Uso compartido de la canoa, si me permiten, y remando contra una fuerte corriente. Me enganche de inmediato, y le pregunte si podía seguirla, y visitar su escuela, sobre lo que me extendió una entusiasta invitación. Lo que me encontré cuando llegue ahí era más allá de lo que podría haber imaginado.
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Día de campo de recaudación de fondos de Padres con verduras hidropónicas y tilapia |
Hector Morales, el director héroe de El Zapote, tomó el cargo hace 4 años. En ese tiempo, él ha hecho lo siguiente:
1) Introdujo jardinería hidropónica toda hecha por los mismos niños con el fin de que la escuela se alimente a sí misma. Producto restante es vendido por los niños para recaudar fondos para sus otros proyectos. En adición, 80% de los niños llevaron hidropónicos a casa, para que sus familias ahora también se alimenten solos, y permutan lo que no necesitan con pescadores, permitiendo que ambas partes equilibren sus dietas.
2) Los niños y sus padres, con la ayuda de miembros de la comunidad, han construido dos lagos de tilapia y uno de camarón. Lo que no se comen ya está pre-vendido a marquetas de pescado en la área.
3) Siendo que no hay artesanía en su pueblo de 500, y porque Hector sintió que los niños necesitaban una actividad que disfrutarían, que inculcara el orgullo, y les ayudara a conseguir dinero para ellos y sus familias, trajo a un maestro, de un área de El Salvador que teje para sobrevivir, quien les enseño a los niños como hacer macas. Este programa ha sido tan exitoso que los niños han tenido que ponerse al día con los pedidos. Cada niño consigue $25.00 por su maca; el resto va hacia los materiales usados. Hector los introdujo a hacer su marca, haciendo que los niños escogieran los colores que identificaría las macas como hechas en El Zapote. Ahora son vendidas a turistas en tiendas de regalos en el aeropuerto, y pedidos han comenzado a llegar desde el extranjero.
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Estudiantes tejiendo hamacas. Los tejedores ganan 25 dólares por hamaca para apoyar a las familias. |
4) Hector hizo un trato con un pescador local de huevos de tortuga en el cual ellos se quedan con 70% de su cosecha y le dan el otro 30% a la escuela. Esto ayuda a conservar las especies, y hace que los niños se hagan responsables de cuidar los huevos, y luego liberan las tortugas antes de imprimir. Este proyecto es parte de la clase de biología, y él ha integrado la ecología, ambientalismo, y autosostenibilidad en todo el curriculum.
5) Cada viernes, toda la escuela participa en una operación comunitaria de limpieza total, la cual termina con el reciclaje y el mantillo.
6) Algo del material reciclado es usado para hacer títeres para una obra de títeres sobre la conciencia ambiental, la cual es realizada por niños de kinder alrededor del condado.
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Hector Morales Director de El Zapote y creador del programa, y mi héroe |
7) Antes de Hector, la educación en El Zapote terminaba en el 8º grado para 95% de los estudiantes. La secundaria más cercana estaba a 2 horas y media por autobús (ida y vuelta). Ahora se ha construido una aula para el 9º grado para el siguiente año escolar, y cada año se agregará una más hasta que el 12º grado se termine. Cada estudiante en el octavo grado ha sido inscrito menos tres de ellos, cuyas familias se están mudando.
Después de regresar de mi visita a El Zapote, le dije a Carlos Corado, el jefe de la unidad de Audio-Visual de la UCA, el jesuita de América Central, la Universidad de Teología de la Liberación, donde la proyección y juzgamiento del Festival tomaba lugar, sobre las maravillosas cosas que había visto y experimentado. Él inmediatamente me asignó uno de sus equipos, y me dijo que fuera a filmar un segmento para su programa "Miradas", con una salvedad: el equipo estaba acostumbrado a reportajes de "cabezas parlantes", y él quería que yo les enseñara como hacer un documentario mejor. Para mí, esto era la combinación ideal: para difundir la palabra sobre Hector y lo que había logrado, estableciendo un ejemplo para otros seguir, y para uno enseñar al hacerlo. Cuatro días después hemos venimos a explorar (2 días), seguido por un rodaje de dos días, y dos días de editar.
Desde mi visita original, la Secundaria ha abierto sus puertas. Cada asiento disponible está lleno. Los padres han solicitado escuela nocturna, para poder conseguir la educación que nunca fue disponible para ellos. Hector se ha comprometido a hacerlo en julio. Él también se las arreglo para conseguir maquinas de cocer donadas y un maestro para asegurar que los niños agreguen otras habilidades más que tejeduría, las cuales les permitirán conseguir el dinero que necesitaran para atender la Universidad.
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Transporte escolar diario de Wendy. Ella canoa piscinas, recogiendo a otros tres, remando contra la corriente |
Las albercas de tilapia están terminadas y llenas, alimentando a la escuela entera durante la hora del almuerzo, con bastante restos para que la marqueta local compre.
Después de notar en su caminata diaria por la mañana que ya no miraba las Iguanas "Doradas", las cuales habían sido ubicuas en el área hasta hace poco, Hector convocó una reunión de padres y solicitó que tres pares fueran traídas a la escuela. Él integró su reproducción, incubación y cuidado de cría a su curriculum de biología, igual como lo había hecho con tortugas marítimas. En abril, la escuela de El Zapote liberó trescientas Iguanas Doradas al desierto. La meta de Hector para el siguiente año es 600.
Para hacer todo esto posible, Hector exitosamente solicitó y obtuvo la colaboración del gobierno, la comunidad, del capital privado a través de la participación de los propietarios de viviendas de vacaciones, y el Ministro de educación: la formula ideal para el éxito en el Mundo en Desarrollo.
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Extra Info
Traducido por Daniel Chávez
Audio Visuales UCA, a través de su programa de televisión semanal “Miradas”, ha sido el único recurso periodístico investigativo de El Salvador, explorando ambos males y éxitos, en áreas tan variadas como adicción al alcohol y la droga, violencia doméstica, actividad de pandillas, programas de rehabilitación, el sistema de corte, desastres ambientales y proyectos de recuperación, artesanías nativas, artistas y músicos, y mucho más…Bajo un nuevo gobierno opuesto, ahora comienza a explorar temas anteriormente tabú. Su primer tal documentario es “Colima”, una exploración de las 14,000 personas que desaparecieron durante la guerra civil salvadoreña, ninguno de los cuales han sido, hasta ahora, representados.